EL MEM INDICÓ QUE SIN HIDROELÉCTRICAS SE INCREMENTARÍA EL COSTO DE LA ENERGÍA ELÉCTRICA, POSIBLES RACIONAMIENTOS Y AUMENTO EN LA CONTAMINACIÓN AMBIENTAL

Guatemala 27 de febrero del 2017. Un análisis técnico elaborado por el Ministerio de Energía y Minas, sobre el impacto de no contar con hidroeléctricas en el parque de generación nacional conllevaría a un retroceso en los esfuerzos para la reducción de precios de la energía, posibles racionamientos y déficit para cubrir la demanda social y que se agrave la contaminación ambiental, serían los serios impactos en el país y en el bolsillo de todos los guatemaltecos.

El Ministerio de Energía y Minas (MEM) como institución rectora del sector energético en el país y en cumplimiento a la Política Energética y los Planes Indicativos para la Generación de Energía, de promover la diversificación de la matriz en este importante servicio, para reducir la dependencia de combustibles fósiles y velando por el cuidado del medio ambiente; realizó este importante análisis técnico con el único objetivo de evaluar el aporte que brindan las centrales hidroeléctricas al sistema eléctrico guatemalteco, periodo comprendido en los años 2017 a 2019.

En la actualidad, la matriz energética de Guatemala está compuesta en su mayoría por recursos renovables. La energía eléctrica generada con hidroeléctricas en el 2016 constituyó el 36% del total de la generación nacional, y representa un soporte significativo para mantener precios bajos para el consumidor final, debido a su bajo costo.

Para evaluar el impacto en un escenario sin generación hidroeléctrica, se hicieron estimaciones y proyecciones utilizando un software de cálculo estocástico denominado SDDP, se simularon los precios de la generación del año 2017 al año 2019, eliminando completamente la generación hidráulica del Sistema Nacional Interconectado, para así contrastar los precios que se tendrían si la generación de plantas térmicas sustituyera completamente la generación hidráulica, estos son los resultados:

a) Impacto en precios de la tarifa:

Sin la generación hidroeléctrica en el Sistema Eléctrico Nacional, el precio de generación alcanzaría el valor pico de 630 US$/MWh, equivalente al Costo de la Energía No Suministrada. Comparándolo, este costo es el equivalente a aproximadamente 12 VECES el precio promedio de energía eléctrica que se observan en la actualidad.

“El precio Spot actual de la energía se cotiza entre 60 dólares el megavatio, este estudio refleja que la fluctuación podría llegar a precios de 630 dólares el megavatio”, señaló el Ministro de Energía y Minas, Ing. Luis Chang.

b) Riesgo en suministro a corto plazo:

De no contar con las centrales de generación hidroeléctrica, se perdería la garantía de suministro que existe actualmente en el sistema, y se pasaría a un RIESGO DE DÉFICIT y RACIONAMIENTO de energía eléctrica, tal como sucedió en la crisis energética de los años 80 y 90.

Caer en una situación de déficit energético impacta directamente la economía nacional puesto que, al no existir certeza de abastecimiento, éste aumentaría el riesgo de quedarse sin energía en las distintas industrias instaladas en el país y aquellas que se prevea instalar.

c) Impacto en Costo de la Canasta Básica Vital

Dentro de la tarifa de energía eléctrica, el 74% corresponde al costo de generación, si bien, en la generación con recursos hídricos ha proporcionado una estabilidad de precios al usuario final; pero a partir del 2014 por la disminución de la incorporación de hidroeléctricas al parque generador, se ha tenido que cubrir esta generación con otro recurso, en este caso bunker y carbón entre 3.6 A 7 VECES más costoso en relación con el recurso hidroeléctrico.

Por lo que al aumentar el costo del precio de la energía eléctrica implica un aumento directo a la tarifa y en consecuencia aumentaría el costo de la canasta básica alimentaria, ya que para Guatemala la misma está compuesta por 26 productos de consumo diario los cuales el 77% de estos productos tienen un impacto directo en su precio, dentro de los cuales se puede mencionar: los lácteos, las bebidas gaseosas y todos aquellos que necesiten refrigeración para su preservación.

Este ajuste a la tarifa de energía se aplicaría en todos aquellos productos en donde las empresas al momento de subir sus gastos, los trasladarían directamente a sus productos al consumidor final.

Adicionalmente se afectaría directamente el empleo nacional derivado a que el cierre de las hidroeléctricas provocaría despidos para fuentes directas e indirectas generadas en áreas rurales; así mismo el incremento de los costos de energía para las empresas provocaría también una reducción en los empleos actuales; implicando con ello posibles migraciones hacia Estados Unidos y un revés a los objetivos planeados del Plan Alianza para la Prosperidad.

Por otro lado el efecto seria adverso para el sistema bancario nacional, derivado a que alrededor de 1,700 millones de dólares de estos proyectos están siendo financiados por bancos del sistema.

El papel de las hidroeléctricas es fundamental en la matriz energética, y esto define los precios de las tarifas de energía a nivel nacional. De hecho, las proyecciones de la Política Energética y los Planes Indicativos de Generación están fundamentadas en la existencia de las hidroeléctricas porque es un recurso que se tiene en el país; en la actualidad se utilizan 1,000 megavatios de un potencial estimado de 6,000 mil megavatios que actualmente posee el país para la generación de energía, y con ello reducir los precios de las tarifas.

Guatemala tiene un gran potencial para generar electricidad con recursos hídricos, sin embargo, existen limitantes que impiden el aprovechamiento de este recurso, como la oposición social, que en algunos casos específicos se ven liderados por personas o grupos con intereses propios que por lo general no benefician a la población; esto puede dar lugar a una idea equivocada de que no es necesaria la ejecución o ingreso de nuevos proyectos hidroeléctricos, la realidad es completamente diferente resalta este estudio técnico.

“Esto es preocupante para el Ministerio de Energía y Minas, ya que, si bien en el país no existe una reglamentación sobre las Consultas a los Pueblos Indígenas, estamos en la viabilidad de trabajar en conjunto para solventar esta problemática. Tenemos una metodología propuesta que ha sido implementada en proyectos hidroeléctricos, ello corresponde a una ruta para buscar acuerdos y consensos de buena fe, como manda el Convenio 169 de la OIT”, enfatizó el Ministro de Energía y Minas.

Guatemala posee las tarifas de energía eléctrica más baratas en relación a la región Centroamericana, al no generar este importante servicio con diversos recursos renovables se tendría que recurrir a la mayor generación con centrales térmicas a base de carbón, diésel y bunker, lo cual encarecerían los precios y elevaría los niveles de contaminación ambiental.

Este análisis revela que, en un escenario sin hidroeléctricas las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), con energía no renovable aumentarían un 88% para el 2017, 87% para el 2018 y 77% para el 2019, con lo cual Guatemala incumpliría con los compromisos adquiridos de reducir estas emisiones, ante la 21.ª Conferencia de las Partes (COP21). Es importante recordar que Guatemala figura dentro de los países más vulnerables a los impactos del cambio climático.

 

RRPP-Unidad de Comunicación Social

Ministerio de Energía y Minas