Con la llegada de la temporada previa a las fiestas de fin de año, es común que muchas personas aprovechen para renovar o comprar nuevos electrodomésticos, como refrigeradores, lavadoras, hornos o televisores.
Antes de dejarte llevar solo por el precio, la marca o el diseño, vale la pena fijarte en un detalle que puede marcar una gran diferencia: la eficiencia energética. Este aspecto no solo influye en cuánto gastarás en electricidad cada mes, sino también en el impacto que generas en el medio ambiente.
Al adquirir un nuevo aparato eléctrico, es fundamental revisar la etiqueta de eficiencia energética, la cual generalmente se encuentra en la parte trasera del producto y se distingue fácilmente por ser de color amarillo con letras negras. En algunos casos, las marcas que promueven un consumo responsable también colocan información sobre su rendimiento energético en la parte frontal del equipo.
Esta etiqueta indica el nivel de consumo eléctrico del aparato, clasificándolo de acuerdo con estándares internacionales que van de la A (más eficiente) a la G (menos eficiente). Los equipos con categoría A consumen menos electricidad para realizar las mismas funciones, lo que se traduce directamente en un menor gasto en la factura de luz.
Además del ahorro económico, optar por electrodomésticos eficientes contribuye a reducir el impacto ambiental, ya que disminuye la demanda de energía y, por lo tanto, las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a su generación. A esto se suma que, en la mayoría de los casos, los equipos más eficientes incorporan tecnología avanzada, que no solo mejora su desempeño, sino también su durabilidad.
Beneficios de elegir electrodomésticos eficientes:
- Ahorro en el consumo de electricidad.
- Menor impacto ambiental.
- Mayor innovación y tecnología.
Poner atención a estos detalles puede parecer un pequeño gesto, pero su efecto colectivo es enorme. Si cada consumidor opta por productos energéticamente eficientes, el ahorro total de energía sería considerable, beneficiando tanto al bolsillo como al planeta.
En esta temporada de compras, recuerda: la mejor elección no siempre es la más barata, sino la más eficiente.
